Setiembre es el mes donde se acostumbra medir el deshielo en el Ártico, debido a que luego viene el invierno y naturalmente la superficie de hielo aumenta. Este año, los records de derretimiento han sorprendido a científicos alrededor del mundo. La NASA ha comunicado que el verano de este año ha llegado a temperatura tan altas que son comparables con el retroceso de hielo del 2007 (provocado por condiciones anómalas).
«El hielo marino no sólo está reduciéndose, sino que lo hace a mayor ritmo», señaló la NASA.