Ya empezaron los Juegos Olímpicos Río 2016 y con ello la realización de iniciativas a favor del medio ambiente. Tal y como lo había propuesto el chef del mejor restaurante del mundo, Massimo Bottura, los desperdicios de alimentos que se generen en la Villa Olímpica servirá para alimentar a personas sin hogar.
La meta, según Bottura, es servir 5 mil platos brasileros en el Refettorio Gastromotiva en el barrio de Lapa de Río de Janeiro a personas en situación vulnerable o extrema pobreza. Los comensales, afirma, podrán degustar de alimentos basados en desperdicios (no sobras) generados por la Villa y Parque Olímpico.
«Tenemos una oportunidad a través de este proyecto, que es cultural, y no de caridad, de luchar contra el desperdicio. Si cambiamos la manera de pensar, podemos hacer que nazca una nueva tradición”, comentó para New York Times. La gran iniciativa impulsada también por el chef brasileño David Hertz, fundador de la ONG Gastromotiva, y la periodista Alexandra Forbe busca combatir la desnutrición, el desperdicio de alimentos y la exclusión social.
El restaurante, que ya abrió sus puertas, recibe ayuda de otros 50 chefs en los que destacan Alain Ducasse, el peruano Virgilio Martínez Véliz y Joan Roca. Además, según el chef italiano, el lugar servirá como una escuela de cocina y estará abierto al publico a la hora de almuerzo. El lema, comenta Bottura, será «pague al mediodía y done la cena». La última donación que recibieron fue de tomates, recibidos por una empresa de catering de la Villa Olímpica; al igual que la colaboración de los chefs.
Foto: Flickr.com/Apega.