Además del salar, uno de los atractivos turísticos de Uyuni es el cementerio de trenes. Allí descansan en paz todos los ferrocarriles que alguna vez recorrieron la ruta Arica – La Paz. Vehículos que –tan sólo en esta ciudad- empleaban a más de mil personas. Este escenario, en las afueras de Uyuni, refleja la bonanza perdida. Como dice una vecina de la zona “así nomás, los vemos todos los días. Así nomás”.