Cada año llegan a los océanos 8 millones de toneladas de plástico, lo que genera una grave contaminación ambiental, potenciales riesgos una vez que estos residuos –convertidos en partículas invisibles al ojo humano- ingresan a la cadena alimenticia y dañando de manera directa a los animales.
Y es precisamente el daño que causa el plástico en los animales marinos lo que ha hecho noticia en estos días cuando se divulgó un video –ya convertido en viral- de una tortuga a la que se le incrustó un sorbete o cañita en uno de los orificios nasales.
El hecho, ocurrido en Costa Rica, fue registrado por un equipo de investigación, que procedió a ayudar al desesperado y adolorido animal.
Hace unos días también un video en el que se ve a un grupo de pescadores en Australia auxiliando a una ballena que se vio en problemas debido a que una bolsa de plástico se había quedado pegada a su cuerpo y a que hilo de pesca se había enredado en su hocico.
Estos son solo dos ejemplos ocurridos en los últimos días que nos muestran claramente el daño que hacemos a los animales al no realizar un manejo adecuado de nuestros residuos plásticos. Recuerda, dejar la basura en lugares adecuados no te cuesta nada.