El anuncio del cineasta Hayao Miyazaki sobre la construcción de una reserva natural para niños en Japón es solo una muestra más de su interés por la naturaleza y la forma en la que los humanos se relacionan con ella. A través de sus películas, el director desarrolla historias increíbles y crea personajes mágicos que exploran este vínculo para luego dar un importante mensaje de conservación.

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Las películas hechas en el Studio Ghibli, la productora y estudio de animación fundado por Miyazaki y su amigo y mentor Isao Takahata, son destinadas para un público infantil, pero dado a la calidad de dibujo y guión, se han convertido en las favoritas de todo tipo de espectadores.

Estas son cinco películas relacionadas con la naturaleza:

1.- «Nausicaa del valle del viento», Hayao Miyazaki (1984)

Cuando el ser humano maltrata a la naturaleza, el valle desarrolla una manera de defenderse debido a la contaminación que ahora sufre. Esta cinta relata la historia de Nausicaä, princesa del Valle del Viento y la primera protagonista mujer de una larga lista que el Studio Ghibli crea.

Nausicaä enfrenta el ejército del reino de Tormekia, que planean una masacre en el Bosque Contaminado y eliminar a los insectos gigantes que viven en él. La historia explota la dificultad del hombre para comprometerse con ideales. Los paisajes, los elementos de la naturaleza como los animales y el desenlace de la historia son impecables, una gran muestra de la creatividad de sus realizadores.

2.- «La princesa Mononoke», Hayao Miyazaki (1997)

Esta es -quizás- la historia con el mensaje más directo sobre la forma en la que los humanos explotan los recursos de la tierra sin preocuparse por los impactos y consecuencias de sus actos. Además, su heroína es uno de los personajes más avezados que Ghibli ha hecho.

Mononoke es conocida como la princesa lobo y siente la responsabilidad de cuidar a las demás comunidades de animales que quedan desprotegidos ante el avance de una actividad artesanal extractiva que amenaza la biodiversidad del bosque. La historia puede ser un poco pesada mientras se desarrolla el conflicto, pero no deja de ser atractiva y mágica. Algunos gráficos y escenas pueden ser duros y salvajes, al igual que el personaje de Monokeke.

3.- «Ponyo en el acantilado», Hayao Miyazaki (2008)

En una entrevista, Hayao señaló que «todos sabemos que el planeta está en problemas y no hace falta que otra película transmita ese mensaje. Pero cuando dibujo el mar, no me queda otro remedio que dibujarlo lleno de basura”. Precisamente, la contaminación del mar es la razón por la que el problema surge en una isla tranquila.

Ponyo es una sirena que escapa de su hogar motivada por su curiosidad por del mundo terrestre, pero su padre siente mucho remordimiento por los humanos, pues los culpa de ser la principal causa por la que el mar luce sucio y desprotegido. El guión  es dirigido a un público infantil, pero sin duda resulta entretenido para los adultos.

4.- «Mi vecino Totoro», Hayao Miyazaki (1989)

La primera obra maestra de Hayao relata la aventura de dos niñas que interactúan con espíritus del bosque, que las invita a conocer sus rincones. Así conocen al rey Totoro, que vive en un árbol milenario junto a otros personajes mágicos.

Aunque la historia no resuelve un problema o amenaza a la naturaleza, el director destaca la presencia de las plantas y árboles como grandes entidades que deben ser cuidados y respetados.

5.- «El castillo en el cielo», Hayao Miyazaki (1986)

Muska y Sheeta viajan en una aeronave durante la noche, cuando es atacada por piratas que, al igual que el gobierno, buscan el secreto de la piedra que Sheeta cuelga de su cuello y que los llevaría a una isla flotante con grandes poderes para controlar el mundo.

La historia nos lleva a una reflexión sobre la naturaleza y la evolución, con paisajes llenos de magia.

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