Según una encuesta de El Comercio-Ipsos realizada en marzo de este año solo el 5% de los limeños utiliza la bicicleta como medio de transporte habitual.
En una ciudad como Lima, donde el caos vehicular se manifiesta como uno de los grandes problemas de disconformidad del ciudadano, el uso de bicicletas se presenta como una alternativa de movilidad sostenible. Sin embargo, su uso cotidiano todavía no se hace habitual debido a la falta de seguridad para los ciclistas, de ciclovías interconectadas y demás servicios complementarios. El 88% de los entrevistados considera que Lima no es una ciudad segura para manejar bicicleta y no le faltan razones.
Pocas ciclovías y mal conectadas
El principal problema es la falta de ciclovías. En la ciudad de Lima contamos con 55 ciclovías repartidas en más de 11 distritos que suman en total 150 km de extensión. No suena nada mal. Sin embargo, si nos comparamos con Bogotá nos damos cuenta de que, pese a que nuestra superficie es casi el doble de la ciudad colombiana, no contamos ni con la mitad de kilómetros de sus ciclovías . En el PLAM 2035, elaborado para gestionar el desarrollo sostenible de nuestra ciudad, se muestra que solo el 6% de los viajes en bicicleta se dan por las rutas de las ciclovías, dejando al 94% restante desprotegido en nuestra ciudad.
La interconectividad entre las ciclovías es otra gran carencia que imposibilita el uso de la bicicleta como medio de transporte. En este mapa elaborado por el proyecto CICLOLIMA se muestra claramente que en nuestra capital estas se encuentran en su mayoría aisladas unas de otras, lo que imposibilita el uso fluido entre distritos. Este es un inconveniente que debería tomar en cuenta el municipio, ya que en la misma encuesta de El Comercio se muestra que más del 30% de los encuestados estarían dispuestos a comprarse una bicicleta de haber ciclovías señalizadas.
Fuente: CICLOLIMA
Además encontramos en la guía para impulsar el uso de la bicicleta “Ciclo-inclusión en América Latina y el Caribe” del Banco Interamericano de Desarrollo que Lima es la ciudad de la región con el menor índice porcentual de viajes de bicicleta. Esto debido, entre otras cosas, a la falta de la infraestructura necesaria para asegurar la seguridad de los ciclistas.
Fuente: Investigación BID
Otras carencias
Los servicios complementarios terminan de englobar un buen desarrollo del transporte sostenible y en nuestra ciudad su situación es precaria. Estacionamientos, talleres para arreglar las bicicletas, rutas y espacios de transferencia modal son necesarios para la promoción del uso de la bicicleta en un centro urbano. Solo para tomar un ejemplo, en Lima solo se cuenta con dos espacios de transferencia modal (espacios donde uno deja el transporte no motorizado para pasar a uno motorizado y viceversa) que son los terminales del Metropolitano (Naranjal y Matellini).
Si bien hacen falta más indicadores sobre el uso de la bicicleta para elaborar un plan de desarrollo a futuro, vemos que el plan presentado por la Municipalidad de Lima para aumentar en 130% la cantidad de kilómetros de ciclovías en la capital aparece como una propuesta interesante ante la necesaria implementación de proyectos en el sector.
Es importante cambiar esta percepción negativa que tienen los limeños acerca de la bicicleta como medio de transporte habitual y empezar a considerarla como parte de la solución frente al latente problema vehícular de nuestra ciudad.