Según la ONU, el año 2013 no fue el más caluroso, pero estuvo marcado por fenómenos extremos, como demuestra el reciente tifón Haiyan y un nivel sin precedentes de los mares.
Según las cifras provisionales (las definitivas serán publicadas en marzo de 2014) publicadas este miércoles por la Organización Meteorológica Mundial (OMM), una agencia especializada de la ONU, 2013 está a punto de convertirse en uno de los diez años más cálidos desde el comienzo de las estadísticas modernas, en 1850.
Por otra parte, «el nivel medio del mar alcanzó un nuevo récord en marzo de 2013», indicaron los expertos. Los nueve primeros meses del año se sitúan, al igual que en 2003, en el séptimo lugar de los más cálidos hasta la fecha. Muchas regiones tuvieron temperaturas superiores a la media, sobre todo el noreste de América del Sur, Australia, el norte de América del Norte, el norte de África y gran parte de Eurasia.
El período enero-septiembre de 2013 fue más cálido que el correspondiente de 2011 y 2012, cuando el fenómeno climático de La Niña provocó un enfriamiento. «El nivel de los mares se elevó a un ritmo medio de 3,2 milímetros anuales (…) cerca del ritmo de aproximadamente 3 mm/año observado durante la década 2001-2010 y corresponde al doble del registrado en el siglo XX, que es de 1,6 mm/año», advirtieron los expertos.
Según el secretario general de la OMM, Michel Jarraud, «el nivel del mar continuará elevándose debido al deshielo de los casquetes glaciares y de los glaciares. Más del 90% del calor suplementario proveniente de los gases con efecto invernadero es absorbido por los océanos, que continuarán calentándose y dilatándose durante cientos de años».
Eso hace temer un futuro más cálido y peligroso para las poblaciones. «Aunque no se pueden atribuir directamente los ciclones tropicales al cambio climático, la elevación del nivel del mar hace que las poblaciones costeras sean más vulnerables a las ondas de las tempestades, lo que tuvo consecuencias trágicas en el caso de Filipinas», explicó Jarraud, refiriéndose al tifón Haiyan.
En Filipinas, el nivel del mar se elevó a un ritmo medio de 12 mm/año, cerca de cuatro veces más que el ritmo medio en todo el planeta, lo que explica en parte la gravedad de los daños causados por el tifón, precisó. Jarraud subrayó que el debilitamiento de las tierras, debido a la explotación humana de las capas freáticas en la región, también amplificó el impacto de la catástrofe.
Las advertencias de los expertos tienen lugar mientras Polonia recibe esta semana la conferencia de las Naciones Unidas sobre el cambio climático, durante la cual 190 Estados continuarán sus negociaciones. Estas deberían desembocar en 2015 en París en un acuerdo global para limitar las emisiones de gases con efecto de invernadero, responsables del calentamiento global.
El banco de hielo ártico se recuperó ligeramente Entre junio y agosto de 2013, una presión atmosférica inferior a la media dominó una gran parte del océano Ártico. Esto limitó el transporte de calor procedente del sur y aumentó la nubosidad, produciendo temperaturas más débiles que el año pasado. Los vientos asociados provocaron una extensión de la cobertura de hielo, que ocupó una superficie mayor.
El banco de hielo se recuperó ligeramente después del espectacular deshielo sin precedentes de 2012, pero su extensión sigue siendo una de las más débiles observadas y su velocidad de deshielo se acelera, según los expertos. Paralelamente, por segundo año consecutivo, la extensión del banco de hielo de la Antártida alcanzó un nuevo máximo, con 19,47 millones de km2, o sea aproximadamente 30.000 km2 más que el récord precedente, establecido en 2012, y un 2,6% más que la media calculada para el período 1981-2010.