La Organización Metereológica Mundial (OMM) de la ONU, encargada de monitoriear el clima global, afirmó que los eventos climáticos extremos registrados en las primeras seis semanas del año, están casi interrelacionados a través de «ondas planetarias».
«La baja presión proveniente de una parte del mundo podría estar relacionada con la alta presión de la otra. Ambos hemisferios están divididos por la línea ecuatorial y no conectados pero desde una perspectiva global, el cambio climático afecta a ambos», señaló el jefe de la OMM, Omar Baddour.
Además, afirmó que el patrón de los fenómenos meteorológicos extremos que se han visto durante los últimos años «llevan la huella inconfundible del cambio climático».
Hasta el momento, las poblaciones de Eslovenia y Australia han experimentado olas de calor, mientras que en América del Norte soportaron frío extremo debido al vórtice polar; a la vez, Gran Bretaña tuvo su invierno más lluvioso en 250 años y el hemisferio sur, registró el comienzo más cálido del año jamás registrado.
Fuente: The Guardian.