Por Vanessa Bolívar @larutadelclima
A poco del inicio de la COP21 o Conferencia de las Partes en su versión número 21, París se prepara para recibir a ministros y Jefes de Estado de 196 países miembros, quienes discutirán sobre el futuro del planeta para lo que va del siglo en materia de cambio climático.
Tal como declaró el ministro francés de Exteriores, Laurent Fabius: “Es una acción absolutamente indispensable en la lucha contra el cambio climático”, por este motivo la cumbre climática se ha mantenido pese a los recientes ataques terroristas en la capital francesa.
¿Por qué el mundo entero concentrará su mirada en París del 30 de noviembre al 11 de diciembre? Las conclusiones de las decisiones que se tomen dentro de esta reunión determinarán los pasos del planeta en lo que va del siglo y marcarán el camino no solo ambiental, sino también económico y social que influirá en cómo respondamos y nos adaptemos a los efectos del cambio climático.
Las decisiones tomadas en París serán el resultado de 20 años de negociación, en los cuales las partes negociadoras han procurado incluir sus posiciones respecto a diversos temas que responden a las siguientes preguntas:
- Si bien es cierto el cambio climático es consecuencia de las emisiones históricas de GEI (gases de efecto invernadero) como CO2, ¿qué haremos para evitar siga aumentando la temperatura del planeta? ¿A qué nos comprometemos los países para reducir nuestras emisiones? ¿Hasta cuándo seguiremos basando nuestras matrices energéticas en combustibles fósiles en lugar de energía renovables cero emisiones? Respuesta: Componente Mitigación.
- Hay efectos del cambio climático como pérdidas económicas de agricultores y pescadores que debido a los cambios de temperatura y precipitación ya no podrán cultivar ciertas especies u obtener ciertos recursos marinos. Esto nos obligarán a cambiar ¿Qué haremos? Respuesta: Componente Adaptación.
- Cuando ocurren inundaciones, ciclones o tifones ya no hay nada que se pueda hacer, se tienen pérdidas materiales y humanas que requieren movilización de ayuda material y económica. Respuesta: Componente Daños y Pérdidas.
- Toda acción en materia de cambio climático requiere fondos para poder realizarse, de lo contrario es inviable. ¿Qué mecanismos se emplearán y como se destinará este financiamiento? Respuesta: Componente Financiamiento Climático.
- Para alcanzar objetivos en materia de adaptación y mitigación se requiere tecnología, pero países en vías de desarrollo no cuentan con este know-how ¿Se obtendrá ayuda internacional en materia de tecnología? Componente Transferencia Tecnológica.
Lo cierto es que las respuestas a todas estas interrogantes aún continúan sin concretarse. Si bien se tiene un borrador del texto final elaborado a fines de octubre en Bonn (Alemania) y que se espera dé luces para agilizar el proceso, todavía hay puntos calientes que comprometen decisiones políticas de nivel internacional con impacto a nivel nacional, tanto estatal como privado que podrían cambiar lo visto hasta el día de hoy.
Uno de esos puntos calientes es la llamada “meta a largo plazo”, que plantea un plan de reducción de emisiones de gases de todos los países más allá del año 2020 con el objetivo de mantenernos por debajo de un incremento de 2 grados centígrados, pero que deberá definirse en las negociaciones.
Algo similar ocurre con el componente financiamiento, donde no se sabe a ciencia cierta si la meta establecida para el 2020 -100.000 millones de dólares anuales a invertirse en cambio climático- debería escalarse luego del 2020 o mantenerse. Tema aún más calientes: quiénes deberían contribuir a este fondo y cómo se repartiría la ayuda a quienes la necesitan.
La COP21 llega a París casi a la misma velocidad con la que llegan los fríos vientos parisinos propios del invierno en esta parte del mundo, lugar que recibirá a presidentes, ministros, delegados nacionales, organizaciones juveniles, representantes de ONG y periodistas de todo el planeta.
Sin embargo, no solo París debería considerarse el centro de la atención, puesto que, alrededor del mundo millones de personas se preparan desde hoy para salir a las calles este domingo 29 de noviembre en la llamada Marcha Mundial por el Clima, que tiene como objetivo que los gobernantes, por espacio de un día, desvíen sus miradas de París y escuchen la voz de la sociedad por la cual decidirán.
(Foto: COP Paris / Flickr)
