Día 3
El día de ayer quienes intentan no producir basura por cinco días nos enseñaron cosas muy importantes que no solemos considerar o, en algunos casos, no queremos pensar. Andri Matsuda nos hizo recordar cuanto contaminan las toallas higiénicas al mundo pero también nos dio una solución: las copas menstruales y toallas naturales.
Jack Lo se puso emotivo y nos contó como la bicicleta lo salvó en momentos de escasez económica en Europa y como hoy, a pesar de encontrarse en una mejor situación, la bici sigue siendo su compañera fiel que lo acompaña a todos los lugares que va.
El café Mamaq nos cuenta como se está organizando como empresa para no producir basura, al igual que ANIA y la escuela de escalada PIRQA.
A continuación los testimonios…
Andri Matsuda – Conservamos por Naturaleza
Día #3 del reto:
Algo MUY IMPORTANTE que me gustaría compartir especialmente hoy que me vino la luna… No se habla mucho de esto pero, nos hemos puesto a pensar a dónde van a parar las toallas higiénicas y tampones una vez que las desechamos? De hecho, no se sabe cuánto tiempo demoran en degradarse pues hasta el día de hoy ninguna lo ha hecho. Se imaginan eso? Todas las mujeres de este planeta tienen, tendrán o tuvieron una etapa de varios años en donde cada mes están en sus días de luna. Eso quiere decir que cada mes, cada mujer bota a la basura entre 15-25 toallas higiénicas o tampones (que además cada una/o incluye un empaque plástico) Lo que hace más de 300 al año y 11000-15000 en todos los años que tenemos el período. Además de las toallitas diarias que casi todas usan, que si es el caso, entonces son entre 40 y 60 por mes, 700 al año y 32000-38000 en los años del período. Cada mujer! Es una locura. Fuera de que es plástico y contiene agentes químicos que contaminan el medio ambiente en todo su proceso de producción y durante su laaaarga vida, TODOS, hombres y mujeres debemos saber el daño y la pérdida de conexión con nuestro propio cuerpo que generamos al usarlas. Ni qué decir de los pañales descartables para bebés… Que seguramente se desechan muchos más porque quién sabe cuántos bebés están haciendo pichicaca todo el día en el mundo.
En mi caso, hace 6 meses decidí hacer algo al respecto y cambié los tampones por una copa menstrual. Ha sido una de las mejores decisiones que pude tomar. Existen copas menstruales y toallas naturales que venden en distintas tiendas naturistas o hay hermanas lindas que las están trayendo/haciendo/vendiendo. Tomar la decisión y hacer la transición fue muy fácil, no sólo por darme cuenta de la contaminación que estaba generando sino del daño que me había estado haciendo.
La energía de las personas circula en sentido horario. Pero cuando una mujer está en sus días de luna,la energía cambia de sentido. Nuestro flujo energético y hormonal cambia por completo. Por muchos siglos, las mujeres en luna se reunían en círculos y hacían ceremonias y siembras de luna. Ellas sabían que en sus días de luna necesitaban retirarse y darse el tiempo y espacio para reconectarse consigo mismas, entre más mujeres, con la Pachamama y recibir la energía de nuestra madre Luna. Es un hecho, que la ciencia no puede explicar todavía, que cuando varias mujeres empiezan a convivir juntas, no hace falta más de 1 mes para que todas empiecen a sincronizarse y les venga la luna en los mismos días. Es porque se abre un espacio sagrado para que ellas se reúnan y cuiden entre sí. La sangre de nuestros úteros contiene células madres. Es una sangre sagrada que nos hemos mal acostumbrado a desechar y hasta a tenerle asco.
Poco a poco, regresemos a esa conciencia y a esa conexión con nuestro cuerpo, nuestros fluidos y nuestro sagrado. Que es realmente un privilegio ser mujer y estar intrínsecamente conectadas con la Luna. No es coincidencia que la Luna tenga un ciclo de 28 días, al igual que nosotras. Aprendamos a conocernos con nuestras lunas nuevas, llenas, menguantes y crecientes. Devolvamos nuestra sangre sagrada a la Tierra… y que genere vida.
*Si alguien quiere más información o conversar al respecto, escríbanme un inbox.
Jack Lo – periodista ambiental
Ya puedo caer pesado con tanto post, pero es parte del reto y todos podemos sumarnos a esta iniciativa de Cambia.pe y B-Green Perú.
Hace seis años viajé a Londres para ver qué hacer con mi vida. Limpié baños de oficinas lujosas, trabajé como mesero y ayudante de cocina en un restaurante peruano, y terminé cuidando a un niño de 9 años. Como el dinero no era lo que me sobraba, comencé a montar bicicleta para ir a todos lados. Lo que comenzó como una necesidad, terminó siendo una de mis grandes pasiones. Mi primera bicicleta fue una que Ronald Klein y Loretta Leberknight me consiguieron de un vecino. Pagué 30 libras (en cuotas) y quedé agradecido de por vida con ellos, parte de este grupo de gente que considero mi familia. Como no tenía plata para los implementos, ellos me prestaban casco, chalecos, herramientas, inflador y todo lo necesario para ser un ciclista responsable.
Después regresé a Perú y lo primero que hice fue conseguirme una bicicleta. Como no tenía plata (volví con 30 libras en el bolsillo) mis grandes amigos y hermanos Javier Rojas y Ana Paula Lopez, me prestaron una que terminé destruyendo por tanto uso. Ya con algo más de plata, pude comprarme una.
Han pasado los años y sigo yendo para todos lados en bicicleta. Y hoy, camino a una reunión con parte del equipo de Conservamos por Naturaleza, me acordaba de esos primeros días en dos ruedas. Si yo puedo salir en bicicleta, todos podemos.
Hasta hoy, minutos antes de las 4 de la tarde, solo he tomado un jugo de piña, y almorcé un chaufa de vegetales que sobró de anoche. Recogí la caca de Ramón con periódico y sigo andando en bicicleta. Cometí un pecado: comer un chocolatito, que vino en un empaque, necesitaba esa energía, pero fue chiquititooooo…
Alfredo Galvez – especialista en Conservación
HOY REUTILICÉ LOS GRANOS MOLIDOS DE CAFÉ PASADO COMO ABONO PARA MIS CAFETALES. #semanasconsumoresponsable#retosinbasura #YoConsumoResponsable Cambia.pe
Hace un tiempo traje a Lima unos plantones de café que hoy en día van creciendo en el jardín de mi casa muy bien. Si bien el lugar donde los sembré tiene muy buenas condiciones de luz y humedad, el clima y altura de Lima no son los ideales para el cafetal. Por ello esta planta necesita abonos especiales para que pueda crecer bien en estas condiciones; obviamente estos abonos vienen en recipientes de plástico, no son abonos orgánicos y contienen muchos componentes químicos que terminan dañando a otras plantas. Al final, uno se termina quedando con un montón de envases de plástico que suelen terminan en la basura y matando a algunas plantas, tal como se sucedió hace un mes y medio.
Por ello, me he comprometido con el RETO, para que durante estos 5 días después de pasar el café en mi máquina por las mañanas, reutilicé esos granos molidos de café pasado mezclados con cáscaras de frutas (con cáscaras de plátano que tienen potasio, así como otros insumos orgánicos) como abono para estos plantones de café. De esta manera puedo reducir en buena medida la cantidad de residuos que se originan diariamente, convirtiéndolos en un elemento que puedo reutilizar y que sirve de fuente de energía para las plantas.
Aparte de esto, en casa estoy apagando las luces que resultan innecesarias y que consumen mucha energía; después del trabajo estoy intentando ir caminando a lugares donde necesito ir sin necesidad de utilizar el auto; y, siempre reutilizamos en casa los periódicos para limpiar las caquitas y pichis de Aceituna, Quinua, Garbanzo y Valentín. En conclusión, hasta ahora voy bien con mis compromisos con el RETO (continúo con las compras de las frutas en bolsa de tela, y las idas y vueltas de casa a la oficina en mi bicicleta) y puedo seguir haciendo mi vida reduciendo residuos y consumiendo responsablemente.
Zoe P. Massey – Bloguera, Comunicadora.
Van a notar que no cocino mucho, un poco porque no tengo tiempo, otro poco porque hacerlo solo para una es mas chamba que disfrute y otro poco mas porque la verdad no me muero por mi propia sazón.
El día fue de harta chamba y algo de comida, almorcé una deliciosa ensalada de frutas del puesto a la espalda de mi tienda en el mercado son gigantes y deliciosas. El agua la lleve en una botella que llevo rellenando hace días y hasta que Ramona (mi loca bóxer) me la robe.
Post chamba la cena fue calentado de pizza, lo bueno es que la de la Boteca no solo trae buenos y frescos ingredientes sino que viene en un envase de cartón. El jugo fue de caja que alguien trajo a casa y que ahora vacía pasa al reciclaje de tetrapak (o a manos de un amigo que tiene en mente hacer una lámpara con ellas, espero pronto poner foto del resultado).
Mi día 3 cierra con una bolsa de basura que solo lleva una mandarina que se malogó en la refri y al bolso de reciclaje van MAS volantes de la misma empresa que ayer … A veces me provoca juntarlos todos y dejárselos en su local. Lo malo es que no solo no entenderían sino que seguro le cae grito al que volantea.
Fin de un día 3 de consumo consciente.
Dos días más y no creo ir tan mal (aparte de exponer mis hábitos alimenticios caóticos).
Micaela Venancio de B-Green Perú
MAMAQ Perú
Nos invitaron a participar en el reto “5 DÍAS SIN BASURA”, se trata de generar lo mínimo de basura, ver la manera de reutilizar o reciclar. Gracias a Cambia.pe y B-Green, quienes nos invitaron, hemos tenido la oportunidad de ver y mapear con mayor detalle nuestros procesos de compra y también de lo que “botamos” día a día.
¡Vamos en el tercer día del reto!
El fin de semana empezaron las compras en la bioferia, como siempre, llevamos bolsas de mercado. Mientras continuábamos con las compras nos dimos cuenta de que la mayoría de los quesos que compramos vienen en pequeñas bolsas de plástico, las cuales hemos lavado y llevado para el popo de las perritas, lo mismo hemos hecho con las bolsas donde viene la panela, el yogur que viene en una botella de plástico lo reciclaremos.
Todos los desechos están separados en un tacho donde solo colocamos los residuos orgánico, pero ahora hemos tenido un pequeño problema y es que nuestros vecinos de Puerto luz ya no están recibiendo el residuo orgánico para hacer el compost, lo hemos mantenido en un tacho cerrado hasta buscar una solución.
En el #DÍA1 del reto todo iba bien, hasta que al medio día llegó un cliente con un vaso de tecnopor que había comprado en otro lugar y lo echo a nuestra basura Emoticono frown , luego vimos también que se terminaron los inciensos y aunque podemos reciclar la cajita, el plástico que contiene los palitos lo botamos.
Todo el resto del día fue muy bien, felizmente tenemos clientes comprometidos que vienen a comer aquí y no piden para llevar, así evitamos el uso de vasitos que aunque son de cartón no sabemos si todos los terminan reciclando.
El #DÍA2 empezó bien, fuimos a hacer compras al mercado local para nuestro almuerzo, compramos lentejas y frejoles para lo cual llevamos un pomo y así evitamos el uso de una bolsa.
Luego compramos algo de fruta para hacer jugo y cuando nos dieron la piña le quisieron colocar un plástico que no permitimos y la llevamos en una bolsa aparte.
El #DÍA3 ha estado tranquilo, pero nos tocó clasificar el reciclaje, ya que tenemos un pequeño contenedor en el café, pero para clasificar necesitamos bolsas negras Emoticono frown las que tuvimos que comprar, igual en muchas oportunidades usamos las bolsas de comida de perros o costales (Como los de verduras).
Hemos fallado un poco, pero seguiremos.
BONUS : Hoy vino una clienta con su tomatodo y lo llenamos de agua Emoticono grinasí ya no tuvo la necesidad de comprar una botella.
Carmen Contreras – Redactora de Cambia.pe
Desde el lunes estoy haciendo el #RetoSinBasura para Cambia.pe y no me di cuenta de lo difícil que era hasta que llegué a casa por la noche. A diferencia de los otros participantes, yo aún vivo con mi familia y en mi caso, el reto tuvo que ser compartido.
El día 1 hice las cosas bien, usé mi bolsa de tela, llevé mi toma todo conmigo y no dejé mi comida. Apenas usé una servilleta y el transporte público con otros 80 usuarios más, como todos los días. Pero al llegar a casa, noté más bolsas de plástico de todo tipo acumuladas en mi mesa. TODO MAL.
Los días siguientes, todo el crédito se lo lleva mi mamá. Sin ni una sola objeción, ahora compra a diario y no semanal, así sólo compra lo necesario y si algo sobra, lo usa en la comida del día siguiente y no pasa a más. Mi refri anda vacía pero siempre tengo algo que comer. También compra en tiendas locales y no en supermercados, favorece a productores pequeños y no invierte mucho tiempo yendo hasta uno en donde además abusan del uso de bolsas de plástico PARA TODO.
Hoy me preparó el desayuno en casa para no llevarme nada al trabajo ni comprar en el camino. Usa las bolsas de tela que cuelgan en la cocina y sólo usa la lavadora cuando hay bastante ropa acumulada, no sólo seis o diez prendas. Quien piense que los hábitos ya no cambian en los adultos, está equivocado.
ANIA ORG
PIRQA – escuela de escalada
Lima Compost
Hoy, en el tercer día del reto de no generar basura por la#SemanadelConsumoResponsable, queremos demostrar que no es necesario recolectar nuestros residuos dentro de una bolsa de plástico que luego terminará en un relleno sanitario o dios sabe dónde, podemos ponerlos directamente dentro del tacho y para evitar malos olores y excesos de líquidos podemos echar aserrín o papel reciclado. Luego todo va al compost y vuelve a la tierra cerrando un ciclo.