El trabajo de un campesino es sacrificado y dedicado. Debido a los cambios extremos del clima, los resultados de sus cultivos son impredecibles. En varias ocasiones incluso pierden sus productos. Hoy, que celebramos el Día del Campesino, es importante recordar el trabajo que hacen para proveernos de alimentos todos los días, y conocer acciones que podemos poner en práctica desde nuestra vida cotidiana para favorecer su productividad:
1. El cambio climático empieza a afectar el trabajo de los agricultores.
“Imananqachá” (¿Qué pasará?) es un documental realizado por Cambia.pe que relata las preocupaciones de estos cambios a través de los testimonios de los mismos agricultores. ¿Cómo la inestabilidad de las estaciones o la intensidad del clima afecta sus vidas? Las experiencias de los agricultores peruanos empiezan a repetirse, conoce sus historias en el siguiente video:
2. ¡Dedicados a conservar!
Los conocimientos tradicionales son una puerta a la adaptación y una forma de reforzarlos es conservando diversas variedades de cultivos. Un buen ejemplo es la comunidad de Sunicancha, en la sierra de Lima, quienes conservan con orgullo productos que les permiten alimentar a sus familias y generar un ingreso económico a través de la venta de sus cosechas.
3. Nuestras decisiones en la dieta alimenticia generan cambios.
¿Te has preguntado cuántas emisiones se producen para que un pedazo de carne llegue a tu mesa? Aunque parezca difícil de creer, la ganadería genera más del 14% de las emisiones de efecto invernadero causadas por el hombre, según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO). Cambia.pe conoció el colectivo «Comida Consciente», que tiene el objetivo de educar con estos datos a los ciudadanos para generar cambios en el mercado de la comida.
4. Antes de consumir, trata de informarte.
Valorar el trabajo de un campesino no consiste solo en apreciar su dedicación y adquirir sus productos, sino de elegir oportunamente lo que crece de la tierra. A diferencia del cultivo de tubérculos o menestras, producir carne genera un fuerte impacto en el entorno debido a que mantener un ganado implica más atención.
(Foto de portada: Paulo Slachevsky / Flickr bajo licencia Creative Commons)
