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Muchos creen que después de consumir alimentos, los residuos se convierten automáticamente en basura. Hay muchas cosas que puedes hacer con ella antes de desecharlas, que te convencerán que no todo está perdido.

Primero, para evitar tanto desperdicio, recomendamos estos nueve tips para reducir el impacto de tu basura. También sugerimos que leas atento por qué es importante conocer de qué manera afecta al ambiente.

Finalmente, dejamos esta lista de ideas para reusar siete alimentos antes de botarlos.

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1. Huesos

Todos los huesos de carne y pescado son excelentes para preparar una sopa de sustancia. Después de cocinar algo con carne y tuviste que sacar los huesos, guardalos en un recipiente en el congelados para cuando estés listo para hacer una gran olla de sopa.

2. Vegetales

Estos también tienen un gran valor, ya se por sí solos o añadidos a otro plato. A menudo sobran una buena porción de zanahorias, lechuga, coles y otras hojas verdes. Si se lavan muy bien, sirven para sancocharlos e incluirlos en una olla.

3. Leche agria

La leche agria es esencialmente lo mismo que el yogur cuando se trata de hornear. De hecho, algunas recetas realmente llaman la leche que se agrió con vinagre o jugo de limón. En vez de tirarlo por el desagüe, guardalo para la próxima vez que se mezcla de un lote de magdalenas, pastas de té, o panqueques.

4. Queso y restos de cortezas

A menudo creemos que una vez que el queso tenga un poco de moho, el contenido ya está perdido. En realidad solo es cuestión de rasparlo un poco y agregarlo a un guiso, sopa o aderezo. El sabor del queso funcionan como excelentes impulsores de sabor.

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5. Restos de café

Los restos de café son ricos en nitrógeno, magnesio, potasio, calcio y otros minerales, lo que los convierte en una gran ayuda para su jardín. Puedes añadirlas al contenedor de compost, espolvorear directamente sobre el suelo, agregarlos a un contenedor de lombrices, o hacer un té lleno de 2 tazas de café molido y 5 galones de agua que es un excelente fertilizante. Si no eres un jardinero,  puedes añadirlos a una limpieza facial hecha en casa, ya que son un gran exfoliante.

6. Pan duro

Si el pan se seca por completo o si tiene costras indeseadas, mezcle en la licuadora y se transforman en pan rallado. Aquellos pueden almacenarse en el congelador hasta que se necesite. O bien, puede cortar el pan duro en cubos y tostadas en el horno para hacer pan frito, que hacen una hermosa adición a las ensaladas y sopas. Aunque en Perú, existe el budín, un postre hecho de pan.

7. Grasa del tocino

Usa la grasa de tocino caliente en un frasco y guardalo en la nevera. Mantenga la adición de nuevas capas cada vez que se cocina más tocino. Utilice la grasa sólida como un sustituto de cualquier aceite de cocina o mantequilla. Se añade más sabor a las verduras salteadas y funciona bien en productos horneados como el pan de maíz.

Fuente: TreeHugger.com

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